¡Se cae de un edificio en el momento de su pedida matrimonial!
A lo largo de nuestra vida habremos visto cientos de pedidas de matrimonio en series y películas de televisión. Y habremos oído hablar de otras tantas, ya sea por típicas, por raras, por tradicionales, por inusuales, o por el motivo que sea. Tal vez la más típica sea la de pedirlo en lo alto de la Torre Eiffel de París, pero existen otros tantos tópicos típicos del romanticismo, como puede ser, una pedida mientras se navega en góndola por Venecia, una pedida viendo un precioso atardecer mientras se toma un buen vino mirando un viñedo, o mientras se cena en algún lugar idílico de vacaciones, viendo un atardecer en la playa, etcétera. La pedida, casi siempre es la clásica, él se arrodilla, saca una cajita, la abre para mostrar el anillo de compromiso a su novia y, acto seguido, hace la temida pregunta. lntimamente ya se hacen pedidas de formas menos clásicas, menos cuadriculadas y algo más divertidas o imaginativas. La novia siempre se va a sorprender y, generalmente, dará una respuesta afirmativa. Pero si hay alguna novia que realmente se sorprende, ésa es la de este vídeo. La pobre se lleva un susto tan grande que seguro que no lo olvidará jamás.